En el mismo lugar
Comentario aleatorio
Lee todos los comentariosMuy buena experiencia! Nos encantó el lugar, el trato y la temática de la sala. Sin duda volveremos!
Vera
Descripción:
Todo se inició cuando, luego de la terrible epidemia, el trabajo escaseaba, la hambruna se apoderaba de las calles, los perros, gatos e incluso ratas eran cazadas hasta su extinción, y la vieja carnicería del barrio de Almagro, “De carne somos”, reabrió sus puertas de la mano de un nuevo dueño, el húngaro László Mészáros, anunciando una propuesta por demás generosa: ofrecer raciones de carne y de guisantes para paliar el hambre de la comunidad a cambio de pequeñas diligencias, trueques, o trabajos de mantenimiento en la deteriorada carnicería.De inmediato, los vecinos comenzaron a hacer cola frente al local para apuntarse en diversas labores o canjes y así llevarse un plato de comida a la mesa, por lo que todo el barrio comenzó a organizarse alrededor de la figura de El Carnicero de Almagro, celebrando la humanidad de este peculiar comerciante, excepto por algunos pocos que, descreídos de su “devoción” caritativa, comenzaron a preguntarse con cierta lógica “¿Pero de dónde salen las reses?”, investigando un poco más de cerca los acuerdos con el carnicero.
En Almagro, aunque nadie lo dijera, se sospechaba que algunas personas habían sido efectivamente tentadas, alcanzando a estampar firmas sangrientas para tener mejores raciones. La policía, con las panzas llenas de bifes y chuletas, poco caso hacía a las habladurías de la chusma.
“Sí, ¡adelante! Hagámoslo”. Como parte de la sociedad secreta “Los topos de Almagro”, vos y un grupo de valientes, ansiosos por develar el misterio que se cierne en el lugar, han planificado el ingreso al local. Aprovechando la diligencia que todas las mañanas lo ausenta a László Mészáros de su local, deciden ingresar por la puerta trasera y develar el misterio alrededor de ¡El Carnicero de Almagro!